"Y ustedes son las piedras vivas con las cuales Dios edifica su templo espiritual. Además, son sacerdotes santos. Por la mediación de Jesucristo, ustedes ofrecen sacrificios espirituales que agradan a Dios." 1 Pedro 2:5
Pedro nos llamó piedras vivas. Tú y yo somos solo ladrillos en el reino de Dios. Solos, somos insignificantes, pero juntos somos una torre fuerte.
Hemos aprendido que una iglesia no se construye sobre el sacrificio de pocos, por el contrario, la iglesia somos todos, y por tal razón debemos tener nuestro corazón por la casa que Dios nos ha dado para congregarnos, pues es el lugar donde hemos sido plantados para dar fruto abundante.
En la primera etapa estamos creyendo por 1.000 edificadores del reino que pongan su ladrillo para acelerar la visión de acercarnos a tener local propio, cada ladrillo sera una siembra de $1.000.000 de pesos moneda colombiana o $300 dolares americanos; puedes sembrar el numero de ladrillos que te guie el Señor.
Gracias por ser parte de la visión, pues Dios ama al dador alegre!