ORACIÓN

¡Continua orando!

por Rick Warren

“Nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra gobernantes, contra autoridades, contra poderes de este mundo oscuro y contra fuerzas espirituales malignas del cielo.” (Efesios 6:12 PDT)

Hay una batalla invisible que está pasando en una dimensión que ni siquiera entendemos. Nosotros no la vemos, no la sentimos. Pero en otras dimensiones hay una guerra espiritual entre el bien y el mal, entre Dios y Satanás, entre ángeles y demonios.

Y el hecho es, que estás atrapado en el medio. Si eres un hijo de Dios, Satanás te odia y quiere destruirte.

La Biblia nos dice en Efesios 6:12 que, “Nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra gobernantes, contra autoridades, contra poderes de este mundo oscuro y contra fuerzas espirituales malignas del cielo.” (PDT).

Cuando oras, a menudo hay una batalla sobre cómo va a ser contestada. Mientras estás en la sala de espera, Satanás comienza a lanzarte dardos – el dardo de la duda, el dardo del desaliento, el dardo de la decepción, el dardo del retraso, el dardo de la depresión. La Biblia dice que debemos ser conscientes de que Satanás va a tratar de derribarte.

La verdad es que la Biblia no nos dice mucho acerca de la guerra espiritual que está pasando detrás de tus oraciones. Pero podemos apreciar una pequeña parte de esta batalla en el libro de Daniel.

Daniel tuvo una visión de un ángel que le decía, “No tengas miedo, Daniel. Desde el primer día que comenzaste a orar para recibir entendimiento y a humillarte delante de tu Dios, tu petición fue escuchada en el cielo. He venido en respuesta a tu oración; pero durante veintiún días el espíritu príncipe del reino de Persia me impidió el paso. Entonces vino a ayudarme Miguel, uno de los arcángeles, y lo dejé allí con el espíritu príncipe del reino de Persia. ” (Daniel 10:12-13 NTV).

¿No son esos los versos más increíbles que hayas visto? Nos dice que Daniel hizo una oración que no fue contestada rápidamente y él empezó a desanimarse. El ángel apareció y le dijo: “Estoy aquí para darte la respuesta, la recibimos desde el primer día, pero hemos estado en una batalla. Fue una intensa batalla de tal forma que el arcángel Miguel tuvo que venir y ayudarme con esta batalla para que yo pudiera venir y decirte que la respuesta está en camino.”

Lo mismo sucede a veces cuando estás esperando una respuesta de Dios. No sabes qué batalla tan intensa está sucediendo debido a tu oración, pero debes recordar esto: Un retraso no es una negación. Cuando la respuesta a la oración se retrasa, esto no significa que no va a ser contestada. Sólo significa que Dios está luchando por ti.

No te desanimes. ¡Continua orando!

Por: Rick Warren

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